Cubriendo el paisaje campestre con ceniza volcánica áspera, abrasiva y electrostáticamente cargada, el Monte Redoubt brinda a los habitantes de Alaska una inesperada muestra de lo que es vivir en la Luna.
«Es muy fina, pero a la vez angulosa; los bordes afilados la hacen sentir áspera y abrasiva».
«Puede causar cortocircuitos y fallas en componentes electrónicos… y daño físico al equipo».
«Es mucho más abrasiva que la arena… raya cualquier cosa con la que tenga contacto…»
«….una verdadera molestia… se adhiere a todo: equipo, instrumentos, …es capaz de penetrar partes selladas, …agujeros de enchufes, partes de herramientas, …»
Todos estos comentarios parecieran referirse a la misma sustancia molesta, pero no es así. De hecho, las sustancias a las que se refieren ni siquiera provienen del mismo planeta.